LA INFANZONA VILLA…

COLUMNA DEL CRONISTA #Columnas

LA INFANZONA VILLA…

Salvador Herrera García

Por estos días, Santiago Tuxtla, la perla de la región se viste de fiesta en honor a su santo patrón, Santiago Apóstol y para conmemorar un año más de su fundación mestiza.

El 25 de julio de 1525, el emperador Carlos V concedió a Tuztla, un original asentamiento olmeca, el título de Villa y el nombre de Santiago, patrón de España. Años después, otro rey, Felipe IV envió como obsequio a la real Villa la escultura ecuestre del Apóstol.

Hace ya varios siglos que Santiago de Galicia, el “mata moros” preside la vida de este pueblo bello y dulce, tan dulce como aquella primera caña de azúcar plantada y cultivada por mandato de Hernán Cortés, en el trapiche de El Uvero.

Y cuentan –entre verdad y leyenda- que en ciertas noches de luna, es posible ver pasar por los puentes o por alguna callejuela, la silueta del señor Santiago, espada en alto y a todo galope, para luego perderse en el cerro del Vigía o en la montaña del volcán San Martín. Seguramente, en persecución de un alma en pena o de algún chaneque trasnochado.

En esta temporada de caprichosas lluvias, un manto multicolor viste la campiña tuxteca, desde los altos del Vigía hasta la ribera del Tepango… río cantarino que brinca entre la pedrería del Palenque y se desliza entre los puentes para trazar el perfil de la Infanzona

Villa, la que aún guarda huellas de su origen hispano.

Es Santiago Tuxtla, la dulce, la amable, la de los nueve barrios, que se envuelve con fragancias de jardines y huertos y en aromas de pan recién horneado…Santiago, la de hondas raíces olmecas y de las enigmáticas cabezas colosales…Santiago, la consentida de don Hernando, Marqués del valle de Oaxaca….

Santiago la pueblerina, de los líceres y de la mojiganga que “siempre sale a las cuatro”…La de sabor andaluz, de torneo de cintas, danza de moros y cristianos… La de fiestas y parrandas, de jaranas y guitarras…La de semanas santas dolientes y prodigiosas navidades.

Santiago Tuxtla, la culta Villa de la escuela “real” de Loubsher, del poeta y cervantista don Erasmo Castellanos Quinto…la de historias, mitos y leyendas que bien ha recreado y contado el cronista y poeta Eneas Rivas Castellanos…

Ciudad bohemia de serenatas y trovadores, de las décimas de Germán de la Maza, de la culta y amena charla Bulmaro Palma, de Fernando Bustamante, de Héctor Luis Campos; del buen son de Río crecido, de la guitarra y voz galana de Miguel Ángel Gómez Diez ,la inspiración de Armando Chacha, de la romanza épica de Daniel Fernández Cadena y el Duque de Miranda…El disparo en la memoria de su actual cronista Carlos Rafael Mendoza.

Santiago Tuxtla, dulce y señera ¡está de fiesta…¡

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