iiSAN ANDRÉS TUXTLA UNA CIUDAD DE GRAN TRADICIÓN!!!

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iiSAN ANDRÉS TUXTLA UNA CIUDAD DE GRAN TRADICIÓN!!!

Desde hace más de 100 años esta emblemática ciudad de nuestra región se ha caracterizado por dos grandes celebraciones, la primera es la suelta de globos de papel y la segunda que estamos por iniciar que es "el desfile de las mojigangas".

Según Don León Medel Y Alvarado en su historia de San Andrés no se conoce una fecha exacta del inicio de esta tradición pero se cree que fué a partir del año 1897 ya que existen evidencias fotográficas de aquel entonces, mientras que periodistas escriben que fué en el año 1830. Cuentan los abuelos: _"como no recordar la alegría de la chamacada del barrio que desde dos meses antes se juntaba en bola y se iban al San Martín a traer el bejuco de granadina y xoxogo, donde al paso de los días iban armando con gran entusiasmo sus muñecos, algunos se juntaban por las tardes en casa de los primos, los vecinos y otros familiares, se repartían comisiones, mientras unos armaban con bejuco otros conseguían el aserrín para rellenar las cabezas duras de los tutungos, mientras que las madres o abuelas de los muchachos apoyaban en hacer las vestiduras de manta o telas de colores llamativos que consistía en un blusón y pantalón, una vez terminados esperaban con ansias el día, empezando con la salida de la aurora, a partir de las cuatro de la mañana sonaban los cohetes y esa era la señal para decir <levántense>, se reunían no nadamás los chamacos con sus papás o abuelitas si no los que irían en el carro alegórico donde llevaban lo religioso con el sonar del tun tun del tambor por delante, este carro años atrás se encargaba de adornarlo la mayordoma rica de la ciudad con ramas de dagame y nochebuenas interpretando en una carreta atrás del carro alegórico la banda con música de viento",¡qué bonito esos tiempos! también contaban mis abuelos, los tungu tutungos antes no salían en la madrugada, salían en un recorrido por la tarde y después de bailar se iban acompañar a la mayordoma pobre para bailarle a la virgen (que fué con quien empezó esta tradición) al compás de la jarana, después venía el velorio con rezos y los cantos religiosos , el fandango, la tamalada, el café con piquete y la suelta de cohetes que invitaba a toda la ciudadanía a llegar al lugar para acompañar hasta amanecer (esos si eran velorios), los muñecos iniciaban su salida en el barrio de Campeche un lugar con familias de mucho arraigo de esta tradición, antes podíamos ver jarochitos en parejas, inditas o personajes políticos, tal vez feitos prero hechos con todo corazón para el pueblo que los veía bailar, estos medían antes máximo 1.50 m de la cintura para arriba ya que entre mas grandes se volvían mas pesados, por lo tanto no podían medir más, los pantalones de los muñecos eran de los tobillos de quien lo cargaba y la pretina quedaba en el pecho, mientras que el blusón colgaba hasta mas abajo de la cintura de quien portaba estos muñecos, no podían faltar el torito que daba sus cornadas y el totole dando sus picotazos, mi pueblo era de gran alegría cuando veía a estos dos porque cuando las muchachas los veían venir sus papás lo cucusiaban y para que el torito, el totole o los muñecos las correteara y les dieran su buen cocolazo, aveces les quedaba hasta los chichones en la cabeza de que estaban hechos de aserrín y las muchachas reían pues a eso iban, era una diversión muy sana.Las diferencias sociales entre los Sanandrescanos no existían, todos se saludaban, todas las familias se conocían, con la llegada de estas fiestas cada grupo social (adinerados y pobres) sabían lo que tenían que hacer , los ricos esperaban el recorrido el atrio de la iglesia y cuando pasaban les aventaban de huevazos y esto era alegría para todos, no causaba molestia alguna. Avanzando en los años se adoptó un sonido al ritmo de marimba que era transportada en camionetas donde los músicos no paraban de interpretar la canción de la mojiganga que arregló don Francisco Torres Berdón (según León Medel y Alvarado). Siguiendo con los años los muñecos empezaron a adoptar otras formas (presidentes y políticos) pero lo tradicional no moría, todos se reunían y salían del barrio Campeche y daban vueltas por las principales calles de San Andrés, esas calles empedradas con subidas y grandes bajadas y terminaban enfrente de la Iglesia de Santa Rosa de Lima, al terminar se les seguía brindando como antes los ya conocidos tamalitos de frijol, atole o cafecito, sin dejar atrás las grandes peleas de los jóvenes atrás de la iglesia confrontándose los barrios mas sobresalientes dándose de moquetazos por algún tipo de insinuación hacia las jóvenes novias de otro grupo. Esta tradición da un gran giro dando paso a una nueva versión de elaboración de muñecos a partir de que la escuela Esbio hace cerca de dos décadas propone que en lugar de utilizar bejuco, usen manguera, tubos de pvc, alambre para la estructura y para la cabeza en lugar de aserrín utilicen engrudo, periódico y pintura, otro tipo de material al alcance de todos, es así que desde entonces los diferentes barrios de nuestro querido San Andrés se concentran por grupos con gigantescos muñecos (ya que no pesan como los anteriores) siguiendo un carro con sonido con música tradicional y moderna pasando como punto principal el parque de esta ciudad donde le esperan niños con sus toritos u otro tipo de muñecos pequeños conforme a sus edad y estatura, jóvenes, adultos, adultos mayores, periodistas, visitantes, etc., aunque separando aun lo religioso que siguen siendo plataformas decoradas con diversos adornos modernos con jóvenes y niños disfrazados de angelitos, vírgenes y de los patronos San José y San Andrés. Esta algarabía se siguen sintiendo los días 29 y 30 de noviembre (días de San José y San Andrés) , 8 de diciembre día de La Virgen de la Purísima Concepción y 11 de diciembre víspera de la Virgen de Guadalupe saliendo la aurora y la mojiganga"

La participación de los jóvenes ha cambiado. es notable ver la ingesta de alcohol, cigarro o algún tipo de preparado, haciendo de los participantes un baile bravo o incluso usando la agresión verbal, sin embargo pese a esto se sigue como cada año participando, aunque muchas veces los diversos grupos piden apoyo al municipio para coordinación con aportación de sonido y no se les brinda salen en busca de patrocinadores y de un buen ambiente para salir a bailar sus muñecos, donde la muchachada se divierte bailando aunque no porten muñecos, no cabe duda que esa alegría y diversión se contagia haciendo de esto "UNA TRADICIÓN VIVA DE MI BELLO SAN ANDRÉS"