AHORROS MAL ENTENDIDOS
AHORROS MAL ENTENDIDOS
Por Antonio Luna Campos
La mayoría de las tragedias podían prevenirse, pero el factor humano, por descuido, falta de interés, de capacitación, corrupción, prisas, mala planeación, la falta de ella, las drogas, el alcohol, materia prima inadecuada, errores en el armado, construcción, falta de supervisión etc. hacen que ocurran.
La muy lamentable pérdida de 26 vidas y esperemos no aumente la cifra y de decenas de lesionados algunos muy graves y a quienes ya les fastidiaron la vida al igual que a sus familiares, es la consecuencia del inentendible derrumbe de un puente del transporte más utilizado por los capitalinos desde su inauguración el 4 de septiembre de 1969, en la que fue bautizada como Línea Uno. Lo más lamentable es que fue la llamada línea 12 mejor conocida como Dorada que no tiene aún 9 años de inaugurada y ya tres veces ha dejado de funcionar total o parcialmente en los años 2014, 2015 y ahora 2021.
Es el segundo mayor accidente en el Metro, recordemos que el primero fue un alcance de trenes en la estación Viaducto el 20 de octubre de 1975 donde perdieron la vida 39 y 79 personas y quedaron lesionadas, oficialmente.
Pero nada justifica lo ocurrido, se habla de posibles causas, el gobierno de la Ciudad de inmediato dio a conocer que contrataría los servicios de una empresa extranjera para que realizara el dictamen y se contrató a la Noruega DNV, pero en parte la responsabilidad está en la persistencia del gobierno actual de ahorrar, ahorrar, ahorrar sin medir las consecuencias, por ello decimos que hay ahorros mal entendidos; el presupuesto del metro va en sentido contrario del aumento de usuarios, al inicio de la presente administración el presupuesto fue de $ 17 224. 20 hablamos del 2019, para el 2020 bajó a $14 290.51 estamos hablando de miles de millones y para el presente, si bien es cierto subió a $15,081. 87 pero resultó inferior en más de $2,000 al ya citado de 2019. En el pasado, el Sistema de Transporte Colectivo contaba con un eficiente mantenimiento preventivo y aunque es vox populi lo verificamos con trabajadores que en su momento realizaban esa función, ahora sólo se realiza mantenimiento correctivo y ello por falta de presupuesto.
Las denuncias fueron múltiples, pero fueron desoídas por los responsables, incluso la directora del Metro manifestó que se realizaban auditorías de mantenimiento permanentes ¿y si así fue por qué ocurrió esa desgracia?, que acaso quienes realizan esa función fueron contratados con el criterio que ha externado el Presidente López Obrador de que los prefiere más honrados que capaces?
Si es así ahí están las consecuencias pagando con su vida inocentes la incapacidad y raterías de quienes tenían la obligación como funcionarios públicos de actuar diferente y no le demos vuelta, las tres últimas administraciones de la Ciudad de México tienen responsabilidad, quien inició la construcción con un sin número de errores, quien lo continuó y supuestamente arregló y quien ahora tiene la responsabilidad y no detectó lo que podría pasar, muy en contra de las auditorías permanentes que dice la que con el incendio en las oficinas del Puesto Central de Control 1 manifestó que ella sólo era la directora y quien durante un año ejerció paralelamente la función de Directora de mantenimiento por renuncia del titular de dicho puesto, con el seguro interés ruin de quedar bien con quien la nombró para ahorrar unos tristes pesos. Eso es un crimen ni más ni menos.
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