- FERNANDO YUNES SE QUEDA EN VERACRUZ
RADIO BEMBA
***No me voy…no me voy y no me voy. Así se interpretaron las declaraciones del alcalde de Veracruz…Maestro Fernando Yunes Márquez…quien tajantemente rechazó que tenga la intención de abandonar su cargo como se ha especulado. Mi administración concluye hasta 2021…el 31 de diciembre de 2021 dejo el cargo por lo cual la ciudadanía votó por mí. Los días que estuve ausente es porque se encontraba en la Ciudad de México gestionando recursos para diversas obras. Estuvimos gestionado casi 100 millones de pesos con el Gobierno Federal y no queremos que se pierda con la transición o cambio de gobierno. De esos recursos se destinarán 20 millones de pesos para el mejoramiento de la vía de comunicación de acceso a Mata de Pita. El resto se asignarán a la repavimentación de varias colonias.
- UN CÁRDENAS A LA DIRECCIÓN DE PEMEX
Refiere BAJO RESERVA
El Universal
Desde el equipo de transición de Andrés Manuel López Obrador se planea una jugada de ajedrez de altísimo nivel para el nombramiento del futuro director general de Petróleos Mexicanos. Nos adelantan que los operadores del tabasqueño buscan que un Cárdenas se quede al frente de la empresa productiva del Estado.
Si está usted pensando en el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas quizá se equivoque. En este caso, nos comentan, se trata de Lázaro Cárdenas Batel, ex gobernador de Michoacán, e hijo del fundador del PRD.
De cuajar el movimiento en el tablero, el grupo compacto de don Andrés Manuel se anotaría una jugada de 10, con un integrante de la familia Cárdenas al frente de la petrolera. Por supuesto, nos explican, algunos interesados en la posición, como Mario Delgado, quedarían fuera del tablero.
- LA PARADOJA DE ANDRÉS MANUEL
ESTRICTAMENTE PERSONAL DE RAYMUNDO RIVA PALACIO
El Financiero
La realidad alcanzó a Andrés Manuel López Obrador. Un cuarto de siglo de organizar y manejar sus campañas electorales en Tabasco, Ciudad de México y tres presidenciales, no le enseñó al futuro presidente de México cómo trabajar en equipo.
Por lustros él lo era todo, el centro y la periferia, y cuando la mayoría de quienes veían que caminaba hacia un error y lo conminaban a rectificar el rumbo, decía: “Denme un voto de confianza”.
Perdió en las urnas por malas decisiones personales, pero aprendió de las experiencias este año y ganó. Lo que nunca asimiló ni se educó es cómo empoderar a sus colaboradores para convertirlos en fieles intérpretes de sus ideas y propuestas.
A poco más de dos semanas de haber arrasado en la elección, lo bisoño de la mayoría de sus colaboradores lo ha puesto en una contradicción que dilapida capital político, a cuatro meses y medio de asumir el poder.