DECEPCIONANTES, LOS CANDIDATOS A DIPUTADOS POR EL DISTRITO XIX DE LOS TUXTLAS
=PAOLA TENORIO, MANUEL ROSENDO, RAFAEL FARARONI Y DIVAJ DÍAZ=
Tras la huella de los líderes
RENOVACIÓN·
Por Francisco Javier Capi Hernández
Los cuatro son profesionistas y algunos con estudios de posgrado, habiendo destacado uno de ellos como empresario, así que la crítica se les dirige exclusivamente a su participación en los menesteres de la política.
Carecen del arte de la oratoria, tanto Paola Tenorio Adame como Rafael Fararoni Mortera tienen muchísimas dificultades para hablar en público; carecen de discurso y no pueden expresar con propiedad sus ideas. A Fararoni ya le hemos criticado sus dislates. Pero el miércoles de la semana pasada, en la conferencia de prensa que ofreció en San Andrés Tuxtla, Norma Rocío Nahle García, candidata al Senado de la República por la coalición “Juntos haremos historia”, contrastó la claridad con la que la ésta dio a conocer los pormenores de la quiebra intencionada de Pemex para entregar la explotación del petróleo y la petroquímica a particulares; nacionales y extranjeros, y la manera como piensan llevar a cabo el rescate. Expone Nahle el proyecto de nación de Morena con claridad y contundencia.
En cambio, cuando le tocó hablar a Paola Tenorio, tuvo la ocurrencia de decir que si no le reconocían el triunfo a AMLO, habría una guerra civil, cuando lo que desea la mayoría de los mexicanos es refundar la república con un nuevo régimen y sistema políticos en donde resalte la honestidad, responsabilidad y compromiso de los gobernantes para proyectar a México hacia su crecimiento y desarrollo, con justicia y equidad para las mayorías. De plano, Paola tuvo que cortar abruptamente su perorata y devolvió el micrófono. Por suerte para ella, al terminar este evento, priístas que conocen mucho de cuestiones político-electorales, como Rodolfo Martínez Baxin, José Luis Silverio Alvarado y Cristhian Betancourt Espinosa, ya se le acercaron y quedaron en reunirse esta semana para platicar y ver si empiezan a operar a su favor y de los demás candidatos de Morena y partidos aliados.
Por su parte, Manuel Rosendo Pelayo es el único que ha realizado con inteligencia y estrategia su campaña, pues ha reforzado su presencia en los municipios de Alvarado y Acula, gobernados por alcaldes emanados del partido que lo postula, el Verde Ecologista de México, así como en Saltabarranca, de donde es originario su suplente Rafael Lira Sánchez, cuyo padre es el alcalde y ya les ofreció su apoyo. También ha amarrado a líderes importantes de la zona cañera y de la cuenca del Papaloapan, ya que entran en el distrito, además de Acula, Tlacotalpan y Amatitlán. Pero debe una amplia explicación de las acusaciones por desvío de recursos durante su administración municipal, en la que incluya el porqué del enriquecimiento súbito de sus colaboradores más cercanos y las rupturas al interior de su equipo, para que se le crea cuando dice que lo más valioso que dejará a su familia es su nombre.
Ha evadido esa explicación haciendo campaña en otros municipios y en algunas zonas rurales de San Andrés, pero tendrá que dar la cara a la ahora exigente población urbana.
En cuanto a Dibanhi Díaz de la Cerda, ha emprendido una tímida campaña, abrumada por el devaluado y rebasado partido que la postula; el PRI, y sabe que no tiene ninguna posibilidad de ganar.
En cuanto a Rafael Fararoni, que se le haya impuesto nuevamente como candidato de la coalición PAN-PRD, a la que se sumó MC, volvió a causar molestia entre los panistas, a tal grado de que varios de los mejores operadores blanquiazules ya están con Morena, como Martín Franco y algunos que nos pidieron no mencionarlos todavía, porque están en la etapa de acuerdos, y otros están trabajando sólo para la candidatura de Ricardo Anaya para presidente de la república, Miguel Ángel Yunes Márquez para gobernador y Julen Rementería del Puerto para Senador.
Al descontento panista que lo llevó a perder recientemente la presidencia municipal en San Andrés Tuxtla, que se extendió a la zona cañera y cuenca del Papaloapan, hay que añadirle un ingrediente más que lo puede llevar a otra derrota estrepitosa, la decepción por los gobiernos priístas y panistas que llevaron al hartazgo y provocaron la ira ciudadanía, que puede desembocar en votos en cascada a favor del partido de Andrés Manuel López Obrador.
Ahora que el Congreso de la Unión requiere de legisladores preparados para los retos que enfrentamos como nación, sensibles, leales, perceptivos, empáticos, congruentes, transparentes, solidarios y comprometidos con sus representados, en el distrito XIX de Los Tuxtlas no tenemos candidatos que nos hagan pensar que desempeñarán un buen papel en la elaboración, aprobación y cumplimiento de las leyes que garanticen la evolución de México hacia más elevados estadios de desarrollo.
